-Estrés y ansiedad: La ashwagandha puede ayudar a regular los niveles de cortisol, lo que a su vez puede reducir los síntomas de estrés y ansiedad.
-Sueño: Se ha observado que la ashwagandha puede mejorar la calidad del sueño y ayudar a conciliarlo más fácilmente.
-Función cognitiva: Algunos estudios sugieren que la ashwagandha puede mejorar la memoria, la concentración y la función cerebral en general.
-Masa muscular y fuerza: Se ha demostrado que la ashwagandha puede aumentar la masa muscular y la fuerza, especialmente en personas que realizan entrenamiento de resistencia.
-Fertilidad masculina: Se ha investigado el potencial de la ashwagandha para aumentar los niveles de testosterona y mejorar la calidad del esperma en hombres.
-Función inmunológica: Algunos estudios indican que la ashwagandha puede tener propiedades inmunomoduladoras, es decir, puede ayudar a regular el sistema inmunológico.