El ghee es la manteca tradicional que se ha clarificado, proceso que elimina los sólidos de la leche: la caseína, la lactosa y el agua. Gracias a esto se puede dejar a temperatura ambiente, sin que se eche a perder.
Está compuesto de grasas saturadas saludables, más fáciles de digerir que las de la manteca tradicional, y que aumentan la capacidad del cuerpo para absorber las vitaminas y los minerales de otros alimentos. Además está llena de antioxidantes, vitaminas y minerales que son solubles en grasa, lo que ayuda en la absorción de estos nutrientes.
Tiene un perfil vitamínico super completo, es rica en vitaminas A, D y E, también vitamina K2 . Es ideal para cocinar a altas temperaturas. Tiene un alto punto de humo, que es la temperatura a la que las grasas se vuelven volátiles y comienzan a transformarse en humo y a dañarse, por lo tanto, cuando se cocina a temperaturas muy altas, el ghee tiene una clara ventaja sobre la manteca.
Cómo usarlo? Igual que la manteca. Para untar tus tostadas, para “engrasar moldes” o para cocinar en la plancha o en el horno. Es super versátil