Las semillas de girasol son sumamente ricas en ácidos grasos insaturados.
Ayuda a rebajar los niveles tanto de colesterol alto como a bajar los triglicéridos altos.
Son ricas en antioxidantes, por lo que ayudan a prevenir la aparición del cáncer a la vez que son útiles para luchar contra los efectos más nocivos del envejecimiento, mejorando piel, uñas y cabellos.
Contiene una gran cantidad de fibra dietética, por lo que están recomendadas a la hora de mejorar la motilidad intestinal, siendo útiles contra el estreñimiento.
Aportan saciedad y son muy depurativas. Por tanto, están recomendadas a la hora de adelgazar o perder peso y como colación sana y natural entre comidas.
Entre las vitaminas más importantes que aporta destaca la vitamina E, mientras que entre los minerales más destacados encontramos: potasio, fósforo, magnesio y calcio.